En estos tiempos de pandemia del COVID- 19, echo mucho en falta y me acuerdo de mis padres, porque hace ya muchos años, cuando les visitaba en la que es mi ciudad preferida León, siempre y antes de abandonarla, mi padre me decía que ya no teníamos matanza en la despensa, (el sitio más entrañable de un hogar) porque cuando hay despensa, hay mucho calor familiar y unas reservas de alimento para el resto del año como cuando vivíamos en Caboalles de Abajo.
Siempre me acompañaba a la calle Platerías nº3 donde se encuentra la tienda de embutidos Guerra de Paz; para mí, es la despensa de las familias de León. Esto lo digo, porque desde los años setenta cuando yo empecé a comprar los embutidos allí, los despachaba Luis Guerra Calderón, quien llevaba el negocio con su esposa Yolanda y quien heredó de sus padres Moisés Y Goya, que lo fundaron en el año 1944; en 2019 celebraron el 75 Aniversario.
En la actualidad lo regentan los hermanos Yolanda y Moisés, que son la tercera generación.
Yolanda me cuenta con mucho sentimiento y cariño, que a lo largo de esos años se produjeron algunos cambios en la tienda desde que su abuelo la montó en 1944. Empezó por ser una tienda de ultramarinos, vendiendo todos los productos de la provincia; eran los tiempos de las Cartillas de Racionamiento, años donde la sociedad de la ciudad era como una familia muy grande porque se conocían todos. De ahí, esa despensa de las familias, donde se tenían que surtir para poder alimentarse. Más tarde, se convertiría en una tienda especializada en vender productos gourmet.
Sobra decir que los cambios del establecimiento se han producido para mejor siempre, pero lo que no ha cambiado es el impacto que te da cuando entras en la tienda, porque te recibe el olor y color de sus ricos y tan variados productos. Sin duda cuando te llevas la compra y la metes en tu coche para regresar a tu hogar, siempre te acompaña ese aroma de calidad que solo puede salir de una despensa como Guerra de Paz.
En estos momentos me llama mucho la atención la exposición que tienen en su escaparate lleno de artilugios hechos, por los artesanos Talleres Ezpeleta, de esos animales que hacen posible tantos productos para nuestras mesas, cuernos de cabras, chivos, carneros, vacas, corzos, buey y gacelas. Guerra de Paz es una tienda con gran variedad de productos: cecina de vaca, cecina de chivo, lomos, chorizos y la riquísima morcilla de León, costillas, botillos y toda una gran selección de quesos, personalizando uno de oveja “Guerra de Paz” que representan a la Comunidad de Castilla y León. También cuenta con una gran variedad de los ricos vinos de Prietos Picudos y legumbres de la comarca, convirtiéndose en toda una referencia “Gourmet” en el Barrio Húmedo de la Ciudad de León.
Me cuesta pensar que cualquier visitante que pase por la capital Leonesa, pueda marcharse sin algún producto de esta despensa, porque no podrá decir que estuvo en León.
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